EN UN PROCESO DE EVOLUCIÓN INTERIOR ES INDISPENSABLE EL REFINAMIENTO INTERNO.
Cuando las formas llegan a ser compatibles con el fondo, cuando lo que mostramos coincide con lo que somos.
Saber quién tiene poder de dominar y manipular es fácil de detectar porque se puede ver en la mayoría de seres humanos, sobre todo los que dirigen y lideran, pero para saber si tenemos un auténtico poder interno es algo mas complejo porque tenemos que echar una mirada profunda hacia adentro. Algo que nos puede ayudar a darnos cuenta muy fácilmente es a través de su significado. El poder no es fuerza ni autoritarismo. Tener poder no es saber hacer obedecer ni condicionar a otros, sino algo muy diferente, es estar en conexión con la fuente creativa inherente a nuestro ser puro e inocente. El poder es la capacidad de crear, producir, hacer o concretar una determinada cosa o acción sin que nada ni nadie se lo pueda impedir.
El poder se ha corrompido en su significado original, tenemos deformada la imagen del auténtico poder ya que lo que vemos normalmente, y lo que conocemos, es falso poder, basado en recursos externos que se utilizan para demostrar o defender algo, para conquistar o atacar.
Recuperar la verdadera esencia de lo que es, y que podamos integrarlo y usarlo en nuestra vida cotidiana es en sí mismo una gran transformación.
Cuando algo se plantea desde la creatividad, siempre manifiesta tener poder, por ello propongo que al hacer algo nos propongamos escoger una manera desconocida, original, única y exclusiva, que no provenga de lo que ya sabemos. El en gran medida el poder está en la capacidad de sorprender. Ser impredecible es una señal de auténtico poder individual.
Desde siempre los humanos hemos estado curioseando, investigando, descubriendo y creando. Ha sido el proceso natural de evolución para sobrevivir. Los humanos hemos creado tantas cosas… objetos, filosofías, herramientas, ciencias, religiones, medicinas, métodos, técnicas… y cada cosa creada ha tenido su utilidad en el proceso de evolución, pero el poder no se manifiesta solamente en el hecho de crear, sino que es ahí donde comienza.
Cuando creamos algo, por ejemplo este texto, luego lo utilizamos, compartimos y expandimos, esto sucede cuando se publica; pero luego el autor puede además refinarlo, perfeccionarlo, y volver a publicarlo de modo que el texto sea más directo, claro y que exprese con mayor contundencia lo que quiero transmitir. Estamos hablando de dar una nueva forma conservando el mismo fondo, de adecuar la manera en la que hacemos algo para que sea compatible con su esencia sin distorsionarla.
LA EVOLUCIÓN DEL PODER A TRAVÉS DE LA CREACIÓN:
La humanidad tiene sed de crear, y lo ha conseguido de muchas maneras, pero no siempre lo que ha creado ha sido compartido con otros, y no todo lo creado ha pasado por un proceso de refinamiento. Hay cosas que se crean y quedan en un cajón como proyecto nada más y ni se expanden ni se refinan. Hay otras cosa que se crean y se expanden pero nunca se refinan. La expansión da poder a lo que ha sido creado mientras que el refinamiento le aumenta su poder. Son dos fases en la que el poder se afianza.
A toda nueva creación le suceden dos fases fundamentales: 1- Expandir o compartir. 2- Refinar o perfeccionar. A veces el orden es inverso.
Expandir es hacerlo conocer, compartirlo con otros, permitir que muchos otros lo puedan usar. Un ejemplo: cuanto más se expande algo por el mundo, como ser una marca, más poder tiene. Desde una religión hasta una franquicia.
Refinar es quitar lo que sobra, es purificar y retocar, es enfocar, depurar, limpiar y afinar de tal modo que no tenga excesos. El proceso de refinamiento hace que una cosa sea más fina o más pura, en especial determinadas sustancias a las que se les eliminan sus impurezas, pero se puede aplicar a todo lo creado. Se refina el lenguaje para ser más precisos; se refinan los conceptos tanto a través de la semiótica como de la teoría de la información; y también es necesario refinar el petróleo crudo para poder utilizarlo como combustible.
Refinar es transformar las formas para que lo creado tenga mayor penetración, es perfeccionar una cosa adecuándola a un fin determinado, pero también es un proceso alquímico que da lugar al nacimiento de nuevas creaciones.
Por lo general los que crean algo no son precisamente quienes refinan lo que crean; de igual manera quienes lo refinan no son los mismos que los que lo expanden.
Todo proceso creativo comienza por la investigación, la curiosidad, la exploración; pero acaba transformándose en una creación. El proceso de CREACION – REFINAMIENTO y EXPANSION lo podemos apreciar en muchas cosas, pero también se puede comprobar el proceso inverso de CRECIÓN – EXPANSIÓN Y REFINAMIENTO. se puede apreciar que la creación siempre está al comienzo del proceso.
Un ejemplo: Mevlana Rumi refinó el Islam convirtiendo al Sufismo en una filosofía y estilo de vida de la que emana paz, amor y presencia divina. Rumi creo una escuela en la que utilizó el vinculo de amor con los discipulos como medio de transmisión de las enseñanzas, lo que permitió una gran expansión. Otro ejemplo es Sidartha el buda quién hizo una investigación en sí mismo de más de 40 años, luego de sus descubrimientos tanto internos como externos surgió la creación en India de una religión en torno a ello. Esa religión se extendió rápidamente en China y luego se refinó en Japón. En este sentido podemos afirmar que el budismo se creó en India porque nació allí; se expandió en China porque allí llego a millones de personas y se refinó en Japón porque allí fue donde nació la filosofía Zen que surge del refinamiento del budismo. Hay religiones que se han creado y expandido por todo el mundo pero que tardan mucho en refinarse, e incluso no lo consiguen, se quedan atascadas en el tiempo, en el dogma o en las escrituras y dejan de evolucionar, entonces ocurre que se desactualizan y ya no son útiles para las necesidades actuales de las personas.
También ocurre con el chamanismo amazónico y la Ayahuasca, que ha nacido en la selva del Amazonas, se ha expandido por el mundo a través de movimientos religiosos, antropológicos y terapéuticos, pero su refinamiento está ocurriendo ahora a través de investigadores creativos que están integrando las plantas maestras a otras herramientas, dentro de los que me incluyo. Quienes participamos en este refinamiento queremos que el contexto en el que se comparte la ayahuasca sea más apropiado a las necesidades del ser humano en este momento de la historia y en cada lugar adonde llegue. es un refinamiento que esta aumentando la penetración de una planta de poder.
Esto mismo ocurre con cualquier creación, incluso con un ser humano, y esto es lo más importante. Nacemos de unos padres y en un lugar determinado, tenemos una genética, un constructo cultural y educacional que nos crea una apariencia, pero luego de crear la creencia de lo que somos nos expandimos a través de nuestra personalidad, que se la tratamos de vender a todo el mundo, buscamos fama, éxito y ser muy conocidos desde el sentimiento de ser especiales; pero luego aparece la posibilidad de refinarnos. Esto significa permitir que lo más puro, auténtico y verdadero salga a la luz, que se manifieste y podamos llegar con mayor precisión y delicadeza desde lo que somos.
De alguna manera, todos los maestros han dicho lo mismo, que seamos nosotros mismos, que brillemos según lo que somos y no según lo que nos han hecho creer, que dejemos atrás las mentiras que constituyen nuestro yo, porque será el más elevado refinamiento que podamos realizar, es hacer los ajustes necesarios para que mueran las identificaciones humanas y nazca la consciencia divina. Es la muerte del falso poder de lo que no es y el nacimiento del poder de la pureza, que no necesita ser, porque ya es.
Rumi dijo: ¨Muestra lo que eres o sé como te muestras»
Alberto José Varela