TESTIMONIO DE UN PARTICIPANTE MEDICO CHILENO, CLAUDIO CISTERNAS, DE SU EXPERIENCIA CON LA AYAHUASCA EN EL 4TO RETIRO DE EVOLUCION INTERIOR, REALIZADO EN CHILE OCTUBRE 2016.
«A propósito de medicina. Hace unos días escribí mi experiencia con AYAHUASCA. Ahí cuando digo «Chamán» hago alusión a la figura de Darwin y Oriana, ambas energías femenina-masculina que orquestaron la ceremonia.
Lo escribo desde mi intimidad para el mundo, porque deseo que esto se promueva. Además respaldar esta medicina con mi rol de médico. Quienes deseen agregarme porfa agréguenme que no los tengo en face. Abrazos»
https://www.facebook.com/claudio.cisterna.9480/posts/230241047407793
Mi experiencia con AYAHUASCA
Llevaba buen tiempo leyendo y viendo videos sobre Ayahuasca. Honestamente no me interesaba mucho la explicación científica que hoy se le atribuye; taxonomía, propiedades, efectos fisiológicos, etc.
Me interesaban los relatos de aquellas personas que sí han tenido experiencias directas con la sustancia.
A la Ayahuasca se le conoce como la madre planta, es una sustancia medicinal de la selva amazónica, utilizada desde hace muchos siglos; desde que el ser humano supo distinguir entre venenoso y medicinal.
Es una planta utilizada con fines sagrados por chamanes en las ceremonias. Tiene una sola finalidad: SANAR.
También había leído comentarios de personas que la usaban con fines recreativos, para huir de su desadaptada vida. Personas demasiado crédulas que se dejaban llevar por charlatanes. Personas que creen que con tragar y chupar sustancias su enredada vida se va a resolver.
NO
Yo me informe por largo tiempo, por ejemplo leí algunos libros de Claudio Naranjo, psíquiatra Chileno, muy reconocido en el mundo, un verdadero sabio que conoce a fondo cómo opera la droga. Él ha llevado la Ayahuasca a un ámbito formal y profesional de la medicina occidental.
Sin duda eso reforzó mi confianza, pero lo que más me motivó a probarla, fue su propio relato personal, él decía «la Ayahuasca me cambió la vida».
Entonces, esa fue mi gran motivación.
Saber que hay personas grandiosas que han probado y experimentado muchas cosas, pero manteniendo siempre un criterio maduro, una actitud amorosa de hacer el bien a la humanidad y a sí mismo.
Fui a un retiro, organizado por «Ayahusca internacional» en Chile, bajo la dirección de profesionales expertos.
¡¡Mi experiencia fue maravillosa!!
Debo reconocer que tenía mucha ansiedad y miedo antes de la ceremonia, porque bien sabido que es una droga fuerte, que te remueve por dentro, te expande y después ya no eres el mismo de antes.
Fueron tres días seguidos; tres tomas de Ayahuasca.
Llevé un cuadernillo para ir anotando mis pensamientos.
El primer día cuando la planta entró en mi, sentí que una energía estaba recorriendo mi cuerpo desde el cabello hasta la punta de los pies. Algo comenzó a expandirse en mi, se agudizaron mis sentidos.
Cerré los ojos y todo comenzó a girar, veía fluidos de colores, mándalas, luces centelleantes.
Luego me vino un mareo brutal, como una especia de borrachera lúcida nauseabunda.
Luché todo el tiempo para no vomitar. Después vino la calma y comenzó una bella experiencia donde comprendí muchas cosas. Me mostró mi árbol genealógico, comprendí por qué existe el sufrimiento, por qué estamos acá.
Entré en una dimensión atemporal donde descargué mucha información.
Al día siguiente me sentía muy liviano, la mente estaba muy agudizada, no sentía dolor de cuerpo o de cabeza, no dejó resaca alguna (como pensé que podía ocurrir).
En ningún momento perdí la consciencia; la Ayahuasca NO es alucinógeno. Produce lo contrario: expande la consciencia, te pone más alerta, lucido.
Al Segundo día vomité como loco.
Comprendí que la Ayahuasca te obliga a vomitar toda esa mierda que llevas dentro y que has cargado por muchos años.
Te hace sufrir momentáneamente pero luego te premia con un estado de mayor comprensión donde surge el amor, la paz, el deseo de besar y abrazar a todo el mundo. El segundo día me sentí como Cristo en la cruz amando a la humanidad entera.
El tercer día fue más tranquilo, pero tuve deseos de ir más allá. En un momento quise aumentar la dosis para botar mas mugre acumulada. El chaman me pregunto si estaba seguro de ir más profundo. Medité un poco y dije que no, que con eso era suficiente. Decidí no abusar.
Al término del retiro salí transformado, supe muchas cosas sobre las cuales trabajar y resolver. Aspectos de mi vida que estaban ocultos y salieron a la luz.
Aceptación total y gratitud fueron las actitudes de todos los participantes del retiro. Todos nos abrazamos, cantamos, reímos, danzamos. Creamos una familia unida por el amor. Cada uno abrió su corazón y contó lo más Íntimo. Eso que todos compartimos.
Mis conclusiones fueron las siguientes:
La Ayahuasca te expande, te das cuenta de que vives en un mundo ínfimo, muy reducido y que esa es una pequeñísima parte de la realidad.
La Ayahuasca te baja momentáneamente el velo de la ceguera y te muestra el vasto universo que hay detrás. Logras sentir que eres uno con el todo.
Es una planta medicinal del alma, que te sana, pero para que pueda entrar y ayudarte debes ir con una actitud amorosa.
La gratitud y el amor es un ingrediente obligatorio antes y después de la experiencia.
Comparto mi experiencia porque a más de alguno le puede servir.
Se están realizando retiros en Chile. Es un hecho, hoy la Ayahuasca ha decidido salir de la selva e ir a ayudar a muchas personas en el mundo.
Algunos hospitales en países como Brasil han comenzado a usarla en terapias. Se está creando un nuevo movimiento de escuela Ayahuasquera en el mundo.
