UN SUEÑO HECHO REALIDAD
Testimonio de Ramón Alan Enriquez, Facilitador integral de Ayahuasca Internacional.
Me encontré con Ramón en Cancún-México el 12 de julio del 2016, él acababa de llegar de Chile, y recordamos cuando nos conocimos hace casi 2 años también aquí en la Rivera Maya donde realicé un retiro de 11 Días junto a mi compañera Paula. En ese momento Ramón manifestó con gran seguridad «Quiero ser facilitador de esta organizacion internacional» desde ahí pasaron pocos meses hasta el día que recogió todas sus cosas en México y viajó a España a formarse con mi escuela. en un año y medio Ramón ha hecho unos avances increíbles en su formación como facilitador. lo puse a prueba y le dije que ahora debía ir a Amnsterdam a un retiro de 8 días, luego a Berlín a dos retiros de 3 y 6 días, total: 17 días de retiros en apenas 3 semanas, y me dijo: «SÍ, ALLÁ VOY». inmediatamente Paula le compró todos sus billetes, estábamos en el hotel y salimos fuera a sacarnos una foto, y en ese momento le pedí hace dos días que me enviara un breve testimonio, pues quiero que cada alumno cuente como ha sido su experiencia. Alberto José Varela.
Esta son sus palabras:
El 24 de febrero de 2015 (hace 504 días, hoy 12 de julio de 2016) llegué por primera vez a España. En ese momento estaba viviendo en la Ciudad de México, dejando una vida. Trabajado en un banco del Gobierno Federal Mexicano, bien remunerado, por lo que satisfacía mis necesidades. Tenía una cantidad de amigos que aprecio y siempre llevaré en mi corazón, que me acompañaron en las buenas y en las malas. Una familia, que a pesar de que hace tiempo vivimos a larga distancia, siempre han estado para brindarme todo su apoyo y amor. Partiendo de una ciudad que me enseño tantas cosas, que me vio crecer.
Sin embargo, a pesar de que la vida me sonreía en ese momento, pensaba que no era todo, que había algo más. Me tomó 5 meses tomar la decisión. Después de mi primer viaje a la selva amazónica colombiana, al Putumayo, una experiencia única. Con maleta y mochila en mano, me embarqué en una aventura hacia Europa de total incertidumbre, sin nada seguro, sin saber que pasaría.
Llegué directo al primer día del Ciclo formativo de Febrero de la Escuela Europea Ayahuasquera, espacio que me ha brindado tanto, me ha permitido profundizar en mi proceso. Solo gratitud a todos los maestros, a todo el equipo, a mi familia espiritual. Ese ciclo fue una experiencia transformadora, que confirmaba lo que mi corazón había decidido. Sea lo que elijan hacer o alguna decisión que tomar, sigan al corazón.
Ahora me encuentro en la Ciudad de México, regresando de Santiago de Chile, donde he trabajado como facilitador en un Retiro de Evolución Interior, donde vivimos noches mágicas, sanación espectacular de muchas personas y procesos de transformación que ocurren a los participantes como en su momento me ocurrió a mí.
Agradezco cada momento que he vivido desde que tomé ese avión, he podido comprender miedos, culpas, juicios, condicionamientos, basura mental, que solo limitan mi libertad. Y tampoco significa, que ya no se presenten en mi vida, de hecho, cada vez se vuelve más complejo. Sin embargo, tengo la confianza y la oportunidad de observarme en cada actividad que realizo, sea un Retiro, un Ciclo Formativo, o un Viajes a la selva, etc.
Como facilitador autorizado por la Escuela ya he visitado muchos países de América y Europa y doy las Gracias a la vida por la oportunidad que me ha dado de viajar y conocer distintas culturas, tradiciones, costumbres. Sin embargo, al final, todos somos uno, lo de afuera cambia las formas, pero lo de adentro es igual. Todos, buscando lo mismo: ser lo que vinimos a ser esta vida, a florecer, a descubrir nuestra potencialidad y llevarla a cabo de forma natural.
Tampoco vivo en “disneylandia”, en un mundo de color rosa, de fantasía. He pasados momentos alegres, tristes, dolorosos, de dicha y gozo. Viviendo intensamente. Y ese es justo el misterio, vivir cada momento, segundo a segundo, al límite. Estar en el aquí y en el ahora, fluyendo con la existencia.
Ahora estoy listo para iniciar un nuevo capítulo: la expansión de Innermastery International México, acompañado de mi familia: Hendara, Samuel y mi futuro hijo, Kenai. Poder compartir con conocidos, amigos, familia y quien sea que esté dispuesto a desafiar la estructura mental en la que vive. Dispuesto a dejar de apuntar hacia fuera y mirar hacia dentro.
Gracias por la invitación que me da la vida a evolucionar, a expandir mi consciencia.
Ramón Alan Enriquez