EL CONFRONTADOR LENGUAJE DE LA VIDA Y SUS CIRCUNSTANCIAS
La impotencia, la desesperanza o la resignación son indicios de que se ha roto la ilusión de ser feliz. Es el momento de dar el salto.
Desde niños aprendemos que hay muchas cosas que funcionan, por ejemplo emociones como la culpa, la ira o el miedo que son reacciones disparadas por los otros o que las activamos en los otros como si fuera un juego de manipulación. También funcionan muy bien ciertas actitudes como la amenaza, el rechazo o el chantaje; que también ejercen dominio sobre otros o que otros pueden utilizar para someternos. De esta manera comenzamos a entender que los otros tienen poder sobre nosotros y viceversa, y que lo externo funciona ya que influencia y manipula a lo interno. En un proceso de no muchos años, cada ser humano se rinde ante la poderosa realidad de no poder conservar un espacio interno propio y genuino no manipulable. Todos anulándonos a todos en un acuerdo inconsciente de convivir en la falsedad social. El anhelo de ser uno mismo agoniza, y de repente lo interior rebalsa de voces externas, ha sido poseído e invadido por los otros y sus creencias. El mayor de los abusos se ha consumado. Ese trágico momento de pérdida de poder marcará el rumbo del camino para siempre. A no ser que se llegue al límite de lo insoportable.
EL PODEROSO LENGUAJE DE LO QUE SENTIMOS
Ante esta realidad humana e individual, la vida y sus circunstancias se ocupan de hacernos sentir que algo esencial no funciona, ese algo es TODO. Y lo comprobamos en el hecho de que no podemos poner en marcha ningún mecanismo interno que nos pueda sacar de las crisis o desequilibrios. El pozo se ha hecho profundo y no sabemos cómo salir. Los tsunamis que nos llegan una y otra vez nos superan y derrumban, y cuando ya estamos a punto de ahogarnos es cuando nos disponemos a pedir ayuda o buscar una solución. Llegar a límite funciona de maravilla porque ya no hay ningún lugar a donde ir.
Ante la profunda angustia e insatisfacción que se siente, muchas personas salen a buscar algo o alguien que les dé una respuesta o solución a lo que les ocurre, y por supuesto que buscan todo tipo de cosas fuera de sí mismos que le pueda arreglar la vida. Lo interno ha desaparecido, sólo queda una idea somera de que hay un interior, sólo se puede pensar en ello o crear una idea de lo que puede ser ese espacio interior pero no por ello poder vivir desde allí. A consecuencia de ello, lo que se ofrece para resolver problemas son opciones externas, por ejemplo: pertenecer a una religión, hacer terapia, formar parte de algún grupo espiritual, seguir a un maestro, consultar a un gurú; practicar yoga, Tantra o meditación, hacer viajes místicos, e incluso tomar todo tipo de medicinas chamánicas, todo es una fantasía creada por lo externo queriendo sacarnos del hoyo de impotencia en el que estamos.
Muy probablemente soy la primera persona en el mundo que afirma: “Las técnicas no funcionan, las medicinas chamánicas o herramientas terapéuticas tampoco; la ayahuasca, el yoga, la meditación o cualquier sistemas de sanación son factores externos; gurúes y maestros están en la misma categoría. NADA FUNCIONA.Y por supuesto nuestro método tampoco funciona, porque en realidad nada funciona a la hora de tener que resolver los problemas internos y de fondo que tiene el ser humano. Nada externo puede resolver lo interno si lo interno no se abre”.
Ha llegado la hora de ser honestos y dejar de auto-engañarnos; si una persona no quiere cambiar o mejorar su calidad de vida y salud, nada le va a ayudar. Si no nos abrimos a una transformación interna nadie nos podrá salvar. En la actitud individual de cada ser humano está la clave de todas las soluciones. Este movimiento interno es propiedad exclusiva del individuo. En la organización que he fundado nos reunimos todos aquellos que estamos haciendo ese movimiento interno, y al juntarnos desde la mutua aceptación se ha transformado en un gran movimiento internacional hacia la consciencia. Estamos recurriendo a los más profundos recursos que estaban olvidados, por eso aseguro que manejamos el arte de recordar lo que el alma ya sabe.
Mucha gente me pregunta: ¿Qué es lo que funciona? La consciencia y el amor funcionan a la perfección, nunca fallan. A mí y a mucha gente le funciona de maravilla. Pero también me preguntan ¿Cómo hacer para que ello se active en mi vida? También me preguntan: ¿Por qué organizo retiros por medio mundo con uso de ayahuasca y otras sustancias enteógenas combinadas con terapias? ¿Por qué tanta gente asegura que nuestra propuesta les ayuda tanto e incluso les cambia la vida? Porque para que se despierte la consciencia y experimentemos el amor es necesario comprender algunos aspectos de la vida, de la existencia y de la realidad en la que estamos. La comprensión es un subproducto exquisito de la consciencia. Cuando hablo de COMPRENDER, me refiero al hecho de integrarlo desde lo más profundo de nuestro Ser. Cuando las decisiones son auténticas comprensiones que experimentamos en lo profundo luego podemos concretarlas para la reestructuración de nuestras vidas. Cuando una comprensión-decisión forma parte esencial de nuestra mente-cuerpo-sentimiento, es porque ya lo tenemos incorporado a nuestra consciencia. Para ello creamos todo tipos de situaciones en nuestros retiros y ciclos formativos, de manera que tanto participantes a retiros como alumnos de la escuela conquisten por sí mismos los espacios internos en donde están todas las riquezas y recursos para hacer frente a la vida. La decisión de reconquistar nuestro interior es una de las más efectivas comprensiones que puede llegar a demostrarnos que hay cosas que sí funcionan de verdad y que no dependen de factores externos. Lanzarnos al interior perdido y desconocido es una proeza que depende de una decisión consciente individual.
Miles de personas se están dando cuenta que no son las medicinas chamánicas, ni los chamanes ni las terapias lo que nos sana o ayuda, sino nuestra apertura y entrega al misterio, nuestra entrega al amor, nuestra predisposición a comenzar de nuevo, nuestra firme determinación de echar una mirada hacia adentro para comenzar a cambiar el enfoque. Entonces, cuando comienzas a resolver tus situaciones por ti mismo/a siendo consciente de lo que vales y puedes hacer, comienzas a reconocer que el merito es tuyo, porque es tu maestro interno quien hizo el trabajo y no ningún factor externo. Todo lo que hayas usado para tu sanación ha sido solo el disparador, el arranque, lo que te ha impulsado o inspirado, pero la decisión ha sido tuya. Es momento de darse cuenta que lo externo no resolverá nuestra vida sino lo interno. La clave es acceder a la fuente de toda nuestra potencialidad y divinidad de manera directa y sin intermediarios.
Por ello el nombre de nuestra organización INNER MASTERY INTERNATIONAL. La maestría interna es el camino de salida hacia los más sorprendentes descubrimientos y creativas soluciones para nuestras preguntas y problemas.
Alberto José Varela
Ampliaremos este tema en la ESCUELA CONSCIENTE
Próxima clase de 3 horas en México DF el Sábado 16 de junio de 11 a 14 horas.